24 Apr, 2024
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Julián Schweizer: uruguayo brilla en longboard

Julián Schweizer representa la pasión por el longboard y el deporte. A los 17 se alejó de familia y amigos, decidido a buscar un destino en el longboard profesional, y partió hacia las olas de Costa Rica. A muchos les causaba gracia o incluso algunos llegaron a burlarse de su sueño. ¿Surfista profesional? Hoy es un competidor con oficio, a pesar de tener solo 20 años. Cualquier competidor tendrá que esforzarse al máximo para ganarle. Se ha hecho un nombre rápidamente y 2018 lo espera en el tour mundial, reconocido por dos ex campeones mundiales como Piccolo Clemente y Phil Rajzman. Ha ganado dos títulos nacionales, cortando con el dominio de Juan Malek. Ha ganado dos medallas Panamericanas consecutivas para Uruguay, fue vice campeón del tour latino ALAS, se clasificó al tour mundial de la WSL compitiendo en Huanchaco, la cuna del longboard peruano, y viajará en enero junto a Nacho Pignataro al mundial ISA que se correrá en China. La historia de Julián es una de sacrificio, de entrega, de constancia y concentración. Y recién comienza. «Se que no soy considerado un surfista talentoso, pero el trabajo y la dedicación dan resultado», reconoce. Aquí disfrutamos con esta entrevista al rookie del World Longboard Tour, al muchacho enfocado en plantar la bandera de Uruguay en lo más alto de cada competencia en la que anota su nombre.

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Julián, durante los últimos Panamericanos en Punta Rocas, donde fue medalla de bronce. Foto: Matías Nóbrega

Edad, peso, altura, residencia:

20 años, 74 kilos, 1,77m. Residencia compartida entre Uruguay y Costa Rica.

¿Contá cómo fue que decidiste encarar el longboard de forma pro?

Surfo desde los 10 años aproximadamente, empecé con la tabla corta. Mi viejo siempre me decía que hiciera longboard, pero no le daba mucha bola. En el 2013 tuve la posibilidad de ir a representar a Uruguay al mundial de la ISA de Longboard en Huanchaco, Perú. Este mundial me marcó y desde los meses previos al mundial en los que estuve entrenando solamente con longboard, nunca más lo solté. Hoy en día es muy raro que me veas en el agua con otra cosa que no sean las tablas de 9 pies. En ese mundial tuve la oportunidad de conocer a un montón de longboarders profesionales a los que admiro y me motivó para querer ser como uno de ellos. Al año siguiente fui a entrenar tres semanas a Costa Rica con Diego Naranjo y desde ahi definitivamente supe que quería ser surfista profesional. Al regresar de ese viaje, les planteo a mis viejos la posibilidad de irme 8 meses a entrenar al país centroamericano, obviamente al principio la idea les sonó muy loca, pero poco a poco los fui convenciendo a que me dejaran pelear por mi sueño. Hoy en día sigo viviendo entre Costa Rica y Uruguay, y eso me ayuda mucho a mejorar el nivel.

¿Qué te decía la gente cuando les contabas tu decisión?

Es gracioso porque la gran mayoría de las personas o no me creían o les causaba gracia la idea de que fuera surfista profesional, la realidad es que pocas me tenían fe. Hasta dentro del circulo familiar cercano mis padres fueron un poco criticados sobre estas primeras decisiones. Es entendible, porque vengo de una sociedad en donde ser deportista de alto rendimiento y más aún surfista es muy raro y somos muy pocos los que recorremos este camino. En lo personal, creo que si las personas se ríen de tus sueños es porque tus sueños son grandes y ambiciosos.

¿Por qué fuiste a Costa Rica y por qué Diego Naranjo?

Después del mundial de la ISA y al plantearme la opción de ser surfista, el paso que siguió fue ver con quién podía entrenar y mejorar. Después de buscar por varios lados, se dio la casualidad de que un muy amigo mío, Matías Nobrega, había ido a una clínica con Diego y me lo recomendó, así fue como llegue a Costa Rica, país en el que hoy en día definitivamente puedo considerar mi segunda casa.

¿Qué pasos te planteabas en tu inicio?

Siempre me gustó soñar, y creo que los sueños son el principio de todo. Mi gran meta deportiva es ser día a día un mejor surfista, creo que no soy una persona con un talento innato para surfear, pero sí con muchas ganas y disciplina. Entrar al WLT era una de mis principales metas y sueños, creo esto es el principal sueño de la mayoría de los surfistas profesionales. También desde chico me planteé llevar el longboard de Uruguay a ser reconocido a nivel mundial, poner a este país dentro del mapa del mundo del surf, esto es algo en lo que todavía creo que me falta bastante por dar.

En pocos años pasaste de ser un desconocido a nivel local, a ser dos veces campeón nacional, vice campeón ALAS, doble medallista Panamericano y nuevo integrante del WLT…ha sido todo muy rápido…¿cómo te definirías a vos mismo dentro y fuera del agua?

Si, la verdad que la intensidad de mis últimos tres años fue increíble, uno siempre sueña con ir cosechando resultados, pero lo que ni yo me imaginé es que fuera tan rápido. Me veo como un gran soñador y que deja todo por cumplir los sueños y creo que uno es el mismo dentro y fuera del agua. Únicamente cambio mi forma de ser cuando estoy compitiendo, hay muchas veces que te toca ir a competir con amigos, pero en el momento de la serie sabés que tienes que ganar y se dejan las amistades de lado.

¿Un saludo o reconocimiento que te haya llenado de orgullo?

Han sido varios, el premio Charrúa a mejor surfista del año 2016/2017, otorgado por el Circulo de Periodistas del Uruguay es sin duda un reconocimiento que me llena de orgullo. También me empezaron a reconocer y respetar algunos surfistas a nivel mundial a los cuales admiro y para mi es algo increíble.

¿Algunos momentos en que las cosas no se dieron pero sacaste fuerza para crecer?

Siempre en la vida hay altos y bajos. Mi primer año de competencias internacionales fue bastante duro, con muchas derrotas por no poder demostrar mi potencial. Siempre de las derrotas se aprende y se juntan ganas y fuerza para las victorias.

Dicen que lo más difícil no es llegar, sino mantenerse en un nivel alto, ¿cuál es el objetivo en el primer año del WLT?

Mi principal objetivo es mantenerme dentro del WLT, esta va a ser el objetivo más difícil de mi carrera hasta el momento. El WLT es el circuito más competitivo del mundo, en donde hay que dar un 110% de si para poder mantenerse.

¿Qué aspectos querés mejorar para mantenerte en la elite?

Muchos, creo que todavía tengo mucho para dar y mejorar. Si bien siento que estoy surfeando bien, creo que estoy lejos de mi techo y eso es algo que me deja tranquilo. Soy uno de los más jóvenes del WLT y siento que todavía tengo mucha experiencia por ganar. Todavía siento que tengo que mejorar en los aspectos técnicos, físicos y estratégicos, creo que siempre se puede dar más.

Explicános, ¿en qué consiste el WLT?

El World Longboard Tour es donde compiten los 34 mejores longboarders del mundo, más dos wildcards (comodines) que da la WSL, es como en el tenis estar jugando los Grand Slam. Hasta el momento hay dos fechas marcadas como tentativas que son Papua Nueva Guinea y Taiwan, pero por lo que escuché, quieren agregar por lo menos dos fechas más. Te clasificas a través de los LQS (Longboard Quilify Series) de cada región, este año había un cupo para la región de Sudamerica y como el primero del ranking Sudamericano Phil Rajzman es el actual número 3 del mundo y clasifica directamente para el año que viene, el cupo pasa para el segundo en el ranking, que este año fui yo.

¿Qué momentos guardás en el mejor recuerdo de tu carrera?

Creo que el momento más emotivo en mi carrera fue sin lugar a dudas el LQS en Huanchaco, Perú, en donde logro la clasificación al WLT y con eso cumplir con uno de mis más grandes sueños. Mi primer campeonato nacional también creo que fue un momento muy lindo y que marcó mi carrera por todo lo que me costó conseguirlo. El mundial de la ISA en el 2013 creo que sin lugar a dudas marcó un antes y un después, fue ahí donde comencé a soñar y por eso creo que es un gran momento en mi carrera.

Tenés una excelente relación con el dos veces campeón mundial Piccolo Clemente, ¿qué significa él?

Piccolo es un surfista al que admiro mucho. Tengo la suerte de ser parte de su team y que me haga los longboards, las tablas que me hace son buenísimas y creo que mi surfing va mejorando de la mano de los longboards que él me hace. Con el tiempo se volvió un gran amigo que siempre me está dando consejos y ayudando a que mejore. Para mi es increíble contar con el apoyo de alguien como él.

¿Cuáles son tus surfistas favoritos?

Hay varios, a nivel local siempre admiré mucho a Luisma Iturria, por cómo es adentro y fuera del agua. También a los longboarders Juan Malek y Antonio Pita, que son grandes surfistas que me ayudaron a formarme en mis primeros años de competencia. A nivel mundial admiro a Piccolo, a Phil Rajzman, los hermanos Delpero, entre otros. Lo loco es que hoy en día todas estas personas que admiro son mis rivales directos, no hay nada mejor que competir contra ellos y aprender lo más que se pueda de estas experiencias.

Julián y Juan Malek, juntos antes de entrar al agua para la Ronda 1 de los Panamericanos 2017. Foto: Matías Nóbrega.

Hablános de las maniobras que te quitan el sueño…

Mi maniobra favorita es el hangten, es como ir volando sobre el agua, es muy difícil de describir lo que se siente en ese momento. Los 360 y los aéreos son dos maniobras que de vez en cuando me salen pero que todavía no las tengo 100% dominadas y creo que está bueno tenerlas en el repertorio.

Luego de obtener dos medallas Panamericanas, ¿mejoró en algo el apoyo para correr el tour mundial y viajar?

Lamentablemente no, sigo con el apoyo de las empresas privadas Chivipizza y Viajes Buemes en Uruguay y con el bufete de abogados Energy Law Firm en Costa Rica. La realidad es que estoy sumamente agradecido con las personas y empresas que me apoyan, pero todavía no es suficiente para cubrir los gastos de mi carrera. Espero que con estos resultados que ponen a Uruguay en el mapa a nivel mundial el Estado pueda empezar a apoyarme al igual que lo hace con otras disciplinas, para mi sería importantísimo. También estaría bueno que más empresas privadas me ayuden a seguir peleando por mis sueños y dejando a Uruguay lo más arriba que pueda.

Foto: Matías Nóbrega

Se viene una nueva experiencia en China…

Este mundial de la ISA va a ser importante, hace 3 años que no se hace un mundial de longboard de la ISA y por eso creo que muchos competidores van a querer ir. Viene siendo bastante complicado costear el viaje, pero poco a poco venimos juntando fondos. Va a ser en un point break de izquierda muy divertido para el longboard. Ni que hablar que voy a dar lo mejor de mi para llegar lo más lejos que pueda.

¿Qué rutinas tenés para estar donde estás?

Como cualquier deportista de alto rendimiento, tengo un preparador físico con el que estoy en constante contacto durante todo el año. La parte física es algo importantísimo en el surf como en cualquier otro deporte y en eso fue algo que siempre me quise destacar. Mi preparador físico es el argentino Sergio Magnani y por más que nos veamos solamente un par de veces al año, estamos todo el tiempo comunicados. La parte técnica y táctica no hay mejor manera de mejorarla que pasando horas y horas en el agua. Costa Rica para mi es un gran lugar para poder entrenar, hay olas prácticamente todos los días. Estando en Uruguay también surfeo casi todos los días, con el longboard no es necesario que las olas estén buenísimas para ir al agua, con la mínima ondulación ya te divertís y podés entrenar.

Hang Ten, una de las maniobras más difíciles y que más buscan los longboarders. Foto: Agustín Múñoz/Facebook Julián Schweizer

Algunos lugares por conocer…

Hawaii e Indonesia creo que son los dos grandes destinos que tengo por conocer. Siempre soñé con viajar a esos países.

Qué música escuchás…

De todo un poco, no tengo preferencia por ningún estilo. Depende el momento del día y cómo me sienta.

¿Cuánto importa la familia?

Mucho, si no fuera por la familia que tengo estaría lejos de estar donde estoy. Estoy muy agradecido de tener la familia que tengo, siempre confiaron en mi y en mis sueños.

Un sueño por cumplir…

Ser campeón mundial.

Una frase de cabecera…

Persevera y triunfarás…

Agradecimientos y saludos:

Agradecer a la familia, amigos y sponsors que siempre me dan una mano y aportan para que cada día sea mejor persona y surfista.

Cuando se conocieron los scores y Julián derrotó al argentino Daniel Gil en la serie por el bronce, se desató el festejo de los uruguayos en Punta Rocas. Foto: PASA/José Luis Duarte