02 May, 2024
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5 destinos atípicos para turismo en Uruguay

 

Según la Cámara Uruguaya de Turismo, en enero de 2018 Punta del Este fue visitada por 194.000 personas, Rocha por 69.000, Piriápolis por 56.000 y el Corredor Termal por 50.500. Sin embargo, a pesar de sus escasos 176.215 km² de territorio, Uruguay tiene varios destinos atípicos que visitar para escaparse de la marea de turistas y los lugares ya conocidos de memoria. Salvaje te trae 5 recomendaciones en esta nota especial para aventureros

Por Pilar Villarmarzo

 

 

Ecoturismo: Caminatas silvestres

Según indica Expedición Uruguay, la organización a cargo de este paseo turístico, el “ecoturismo” se define como la modalidad turística “ambientalmente responsable”, que implica visitar áreas naturales sin generar disturbios, con el objetivo de disfrutar y apreciar sus manifestaciones naturales y culturales mediante la búsqueda de su conservación y de beneficios económicos para las poblaciones locales.

Por eso, las Caminatas silvestres implican adentrarse en distintas áreas naturales durante dos o tres días, bajo la premisa de que “nuestros antepasados anduvieron por un mundo sin carreteras ni caminos y sin ver edificios u oír motores”. Así, se atraviesan las zonas naturales y se acampa sin dejar nada a su paso, por lo que no se corta leña, no se lava la vajilla que se usa en los cursos de agua y el grupo está integrado por un máximo de 12 personas. Esta propuesta, además de lograr un aislamiento de la rutina –y no ser apta para personas poco entrenadas- permite que más personas valoren la naturaleza y estén más comprometidas con su conservación.

Laguna Negra, Laguna de Castillos, Quebrada de los Cuervos, Arerunguá, Pilares de Klinger y Gruta de los Helechos son algunas de las áreas que se visitan en las caminatas.

 

 

Turismo minero

En el departamento de Artigas, el grupo Turismo Minero ofrece un tour que incluye un recorrido por los túneles de extracción de piedras, a 50km de la ciudad, una visita a una exposición de amatistas en bruto y luego a una de las muestras más importantes de amatistas gigantes, donde se aprende sobre el proceso de corte y lapidación de piedras, y se visita el centro de artesanos para reconocer el trabajo de joyería tanto de amatistas como ágatas y otras priedas traídas de distintas partes de América del Sur. Según explicó a Salvaje Lans Signorelli, guía del tour, el paseo consta de cuatro horas de duración y puede realizarse cualquier día de año.

Otra opción según indica Uruguay Natural es el Safari Minero, que consiste en una visita guiada a las canteras ubicadas en la región El Catalán, donde se extraen geodas de amatistas y ágatas de interés internacional tanto por su tamaño como por su intenso color violeta. Al realizarlo, el turista puede recolectar sus propias piedras semipreciosas para lo que es provisto de herramientas, capacitación y equipamiento de seguridad. De regreso a la ciudad, se visitan diversos talleres donde las piedras que llegan en bruto se someten a procesos industriales artesanales para prepararlas para su comercialización.

 

 

El safari dura aproximadamente 5 horas y supone recorrer unos 150 kilómetros por la ruta nacional número 30 y por caminos panorámicos entre los campos donde se encuentran las minas. El trayecto es oportuno para dejarse sorprender por la flora y la fauna de la zona, y para visitar pintorescos almacenes de campaña, así como, disfrutar de los productos típicos que ofrecen.

 

 

Experiencias subterráneas

La organización KAM Uruguay se dedica a crear experiencias, mediante viajes, eventos, actividades y programas, caracterizados principalmente por un fuerte contacto con la naturaleza, el deporte, la aventura y el seguimiento personal y profesional de cada uno de sus participantes. En esta línea, propone visitar la mina de cobre «La Oriental» y las Grutas de Salamanca en una visita de dos días, mediante un descenso de 14 metros, un recorrido por los 300 metros de galerías subterráneas de la antigua mina, una experiencia sensorial noctura en un refugio natural en la roca, senderismo hacia cuevas, senderismo interpretativo (donde un guía ayuda a los participantes a entender la naturaleza que los rodea y aprender de ella) y espeloturismo (donde se estudia la fauna y flora de las cuevas subterráneas). ¡No recomendado para claustrofóbicos!

 

Foto: Karumbé

 

Voluntariado con tortugas marinas en Cerro Verde

Karumbé, organización que protege la biodiversidad en peligro, principalmente a las tortugas marinas y sus hábitats, y promueve el desarrollo sustentable de las comunidades pesqueras, propone una forma alternativa de pasar el verano en la playa: quedarse en La Coronilla como voluntario para ayudar a la preservación y protección de las tortugas marinas del área protegida Cerro Verde.

 

 

El voluntariado, que debe constar de una semana como mínimo, implica desarrollar actividades de investigación y conservación de las tortugas marinas y otras especies, además de trabajar en conjunto con los investigadores de Karumbé que estén coordinando el trabajo de campo, involucrándose en todo tipo de actividades.

Según indicó Karumbé a Salvaje, esta actividad puede ser llevada a cabo entre diciembre y abril. Podés leer más acerca del trabajo de la organización haciendo click ACÁ.

 

 

Represa de Cuñapirú

Las ruinas de la antigua Represa de Cuñapirú, a 4km de Santa Ernestina, en el departamento de Rivera, son declaradas monumento histórico nacional. La represa, dedicada en su momento a la producción de energía, y extracción y purificación de oro -capaz de producir y moler 150 toneladas de cuarzo al día-, fue la primera represa de América del Sur, inaugurada en 1882. Hoy, pueden visitarse sus grandes salones y conocer la maquinaria, los edificios y el río con el que linda, además de la zona de camping.